Hemos publicado un nuevo video en el Canal de la Asociación Vecinal las Fuentes dedicado al entorno natural de la orla este, como el que hace unas semanas ya os trajimos a nuestra web. en esta ocasión, y bajo el título SOS Cantalobos y Huerta de las Fuentes
SOS CANTALOBOS Y HUERTA DE LAS FUENTES
Volvemos a Cantalobos, pero esta vez no lo hacemos solos, nos acompañan los amigos y amigas de ANSAR, la Asociación Naturalista de Aragón.
ANSAR y la Asociación Vecinal Las Fuentes tenemos intereses comunes en lo que tiene que ver con la protección, recuperación y mantenimiento de este bosque de ribera de alto valor ecológico que representa el Soto de Cantalobos.
Gracias a nuestros acompañantes hemos aprendido a distinguir algunos árboles como los álamos, sauces, fresnos, chopos o arbustos como los rosales silvestres hemos aprendido cómo es el apio caballar, una planta comestible con presencia. Apenas iniciado el recorrido por el camino de La Alfranca, el sendero por el que nos internamos en el bosque que nos ha permitido disfrutar con el potente canto del ruiseñor o el sonoro piar del pájaro carpintero, de los colores que tienen sus nidos en los troncos de los chopos secos, circunstancia está que se da a menudo por el estrés hídrico del soto en verano tras la construcción del Camino a La Alfranca, que hace que se limite el trasvase de humedad de las huertas hacia el Soto. Hemos conocido también el mecanismo por el que los desagües de la ciudad permiten el flujo hacia el río e impiden e impiden que fluya al revés cuando hay crecidas
Otro aspecto que nos une es la demanda desde hace décadas de la recuperación de la Huerta de Las Fuentes para que vuelva a abastecer a la ciudad de verduras y hortalizas de cultivo ecológico con una agricultura sostenible extensiva y regenerativa. Lo primero que exigimos de las administraciones es un compromiso de que el crecimiento de la ciudad no puede ir por suelos tan productivos como el que representa la Huerta de Las Fuentes. No se puede segmentar los suelos productivos, tienen que fijarse en modelos que ya funcionan en otras ciudades del estado en las que se vuelve a mirar a las zonas productivas próximas como elemento fundamental de la lucha contra el cambio climático y es ahora o nunca. Ya está bien de pasar de perfil por parte de los responsables políticos y técnicos agrícolas y medioambientales con responsabilidad en la ciudad. Hay que revalorizar el consumo de productos de proximidad y de calidad y hay que incentivar a los agricultores para que el cambio sea posible en las ciudades sostenibles que ocupan un lugar importante las áreas agrícolas en continuidad con las áreas urbanas. Hay una necesidad de que los productos agrícolas recorran la menor distancia posible entre el productor y el consumidor. La DGA podría empezar ya mismo, si quiere, promoviendo huertos urbanos en las hectáreas de su propiedad expropiadas en su momento para un parking de autobuses que luego no cuajó.
Por ello exigimos a Medio Ambiente de la DGA que haga algo con esos terrenos. Os vamos a seguir dando la vara porque ese es el camino.